En el marco del programa cultural del proyecto Lituanie en France, dos muestras monográficas dedicadas a artistas del país báltico pueden contemplarse en el Carré d´Art de Nimes: la primera, Aleksandra Kasuba (1923-2019), transitó en las fronteras entre el diseño, la arquitectura y el arte experimental y esta exhibición francesa, titulada ” Imaginer le futur”, será su primera presentación amplia en Europa; la segunda, Marija Olšauskaitė, nacida hace 35 años en Vilna, despliega en la sala de proyectos de ese centro “The Softest Hard”: varios trabajos en vidrio en los que ha buscado reflexionar sobre la vigencia de la tradición artesanal y el ornamento y sobre el posible rol social de la escultura.
Kasuba, cuya retrospectiva se ha concebido a modo de recital luminoso sobre las posibilidades de futuro que permiten las pérdidas y las opciones que no borran los tiempos turbulentos, huyó de su país tras la II Guerra Mundial y las ocupaciones nazi y soviética, y emigró a Estados Unidos, junto a su marido escultor, tras algunos años en un campo de desplazados alemán. Sería en 1963 cuando, establecida en Nueva York, emprendió la realización de ambientes espaciales con mucho de visionario elaborados a partir de telas extendidas; quiso representar en ellas emplazamientos imaginarios y atemporales donde pudieran habitar las almas errantes y en los que no hubiese rígidos ángulos rectos.
Estos refugios, que adquieren un sentido muy distinto desde el conocimiento de su biografía y que han llegado a exhibirse en entornos públicos, testimonian su deseo de armonizar la convivencia del individuo, la naturaleza y la tecnología; todas las piezas que forman parte del montaje y su documentación fueron donados por la artista al Museo Nacional de Arte de Lituania en el periodo comprendido entre 2014 y 2019; en el caso de los documentos, los originales se conservan en el Smithsonian de Washington. La exposición se completa con trabajos cedidos para la ocasión por el artista – perfumista Danutė Pajaujis Anonis, la actriz y cineasta Pola Chapelle, el creador Fluxus George Maciunas y el director de cine Jonas Mekas, que fueron sus amigos.
En cuanto a Marija Olšauskaitė, que continúa residiendo en Vilna, ha basado su trabajo en la indagación en cuestiones ligadas a las relaciones humanas (pertenencia, intimidad, necesidad de apertura) y sus procesos son a menudo colaborativos. Esta muestra en Provenza ha querido detenerse en su querencia, desde los inicios de su trayectoria, por el vidrio: crea formas que parecen encontrarse en continuo estado de transformación, en ese material y en otros más convencionales o contemporáneos, como la silicona.
En Nimes veremos mamparas de vidrio en las que podremos detectar referencias tanto a los espacios domésticos, y a lo que en ellos se puede o no hacer visible, como a la fragilidad de los lazos humanos; destacan además las esculturas de la serie Ponds, horizontales y en gran formato, semejantes a bloques de hielo translúcidos y luminosos, ya que sugieren nuevos caminos de relación entre la forma y la función, pues su diseño las convierte en inutilizables, en objetos puramente enigmáticos.
Su producción remite, en general, al buen momento que conoce la elaboración de vidrio en su país: Olšauskaitė continúa trabajando con artesanos y empresas aún activas, y en sus comienzos recuperó placas coloreadas de la firma Raudonoji Ausra, que cerró en los noventa, empleadas para generar vidrieras; los operarios las habían extraído clandestinamente de la fábrica, lo que le permitió adquirirlas y concederles nuevas vidas. Actualmente forman parte, esas piezas, de su serie Never Act in Haste.
Tremendamente peculiares, sus obras parecen gozar de vida propia, encontrarse inmersas en un proceso alquímico, a medio camino entre el estado líquido y sólido, abiertas al azar en la transición. Sus formas podrían venir del futuro y no nos ofrecen interpretaciones dadas, por más que establezcan relaciones entre sí: cuentan en el montaje con creaciones gemelas o hermanas entre las que se establecen dinámicas familiares.
Tanto Kasuba como Olšauskaitė han procurado repensar en definitiva, sea desde la tela o desde el vidrio, el espacio o la forma, modos de relación más fructíferos y el papel social de la creación.
Aleksandra Kasuba. “Imaginer le futur”
Marija Olšauskaitė. “The softest hard”
CARRÉ D´ART. MUSÉE D´ART CONTEMPORAIN
Place de la Maison Carrée
Nîmes
Del 25 de octubre de 2024 al 23 de marzo de 2025
