El Castello di Rivoli repasa la trayectoria de Thomas Ruff
Thomas Ruff
jpg td02, 2006
Cortesía del artista
Del 18 de marzo al 21 de junio de 2009, en el Castello di Rivoli
Pese a ser uno de los primeros artistas que pudieron desempeñar su labor como fotógrafos en una época, la de finales de losochenta, en la que este medio había adquirido pleno reconocimiento como arte independiente en el marco de la creación contemporánea, el alemán Thomas Ruff siempre capturó sus instantáneas desde el escepticismo: para él no eran más que meras láminas delgadas que, pese a su aparente realismo extremo de cara al espectador, ponían de manifiesto nuestra gran imposibilidad de experimentar sensaciones veraces en la era digital que vivimos y la incapacidad de la fotografía de mostrar un registro fiable de la realidad, cualidad que, se suponía, era su principal atributo.
CASTELLO DI RIVOLI
Piazza Mafalda di Savoia
Rivoli
Las imágenes de Ruff, por ello, parecen tratar de transmitir ese fracaso de la fotografía de forma consciente y buscan silenciar toda posible emoción, comprobado ya que ninguna sensación puede hacerse llegar al público en toda su riqueza con los medios que el arte ofrece. La exposición que hasta el 21 de junio podrá contemplarse en el Castello di Rivoli se abre con algunos de los trabajos más recientes de este creador, como Cycles, y sus impresiones digitales sobre lienzos en las que indaga en la plasmación virtual del espacio y su incidencia en una posible desaparición de la fotografía, arte cuyo desarrollo continua estrechamente ligado al de la pintura. Podremos contemplar así mismo obras como Noches (1992 y 1996), que constituyen la respuesta de Ruff a las imágenes de bombardeos nocturnos emitidas por las televisiones durante la Guerra del Golfo. A partir de ellas Ruff optó por fotografiar distintas localidades próximas s Dusseldorf y aplicar a esas instantáneas una peculiar tinta verde que las hacía inquietantemente próximas a las anteriores secuencias bélicas. En Substrato, proyecto que viene realizando desde 2001, manipula fragmentos de los conocidos dibujos japoneses manga para transformarlos en obras casi psicodélicas; también ha empleado en ocasiones como fuente de inspiración vistas del cielo estrellado e incluso radiografías para subrayar el complejo papel de la fotografía y sus esfuerzos vanos por ser espejo de lo real. La arquitectura, especialmente la ideada por el también germano Mies van der Rohe o la del Mercado de pescado de Nápoles, obra de Luigi Cosenza, también tiene gran cabida en su producción y la tendrá en la muestra.
Buscando una minuciosa clasificación de su obra y tratando de encauzar su metodología de trabajo través de procedimientos seriados, ha elaborado otras series de instantáneas presentes en la muestra, como la de jpg.s o la de desnudos. En la primera de ellas trastoca la estructura de los píxeles de modo que sus fotografías sean todavía legibles a una distancia igual o superior a cinco metros pero sean percibidas más y más abstractas a medida que nos acercamos a ellas; en la segunda serie, iniciada en 1999, ha utilizado imágenes pornográficas descargadas de Internet para llamar la atención sobre la enorme fantasía mecanicista de nuestro tiempo, en la que el deseo sexual parece haber sido reducido a un efímero automatismo eléctrico.
Thomas Ruff
Susbstrat 16 I, 2002
Thomas Ruff
Zycles 3041, 2008