NOMBRE: Rebeca
APELLIDOS: Plana Perpiñá
LUGAR DE NACIMIENTO: Albalat de la Ribera, Valencia
FECHA DE NACIMIENTO: 1976
PROFESIÓN: Artista
A nuestra última fichada la conocimos en una de las primeras exposiciones que pudimos visitar en Madrid tras el pasado confinamiento y su muestra se llamaba, justamente, “Begin the beguine”. Se trató de la primera individual de Rebeca Plana en la Galería Álvaro Alcázar y constó de una decena de pinturas de gran formato que esta artista valenciana había realizado específicamente para la ocasión y que aludían a ese espíritu entonces compartido (los resultados ya han sido dispares) de volver a empezar.
Aquellas obras (realizadas sobre lino, un soporte con el que Plana hasta ahora no había trabajado) se caracterizaban por su gestualidad fluida y rápida, derivada de procesos de trabajo directos e igualmente fluidos, y por una riqueza cromática que nace sobre todo de las emociones y que las suscita.
Licenciada en la Facultad de Bellas Artes de San Carlos de Valencia y formada también en la Facultad das Bellas Artes de Lisboa y en el Colegio de España en Paris, Plana presentó antes exposiciones individuales en este último centro francés, en la Sala Gallera valenciana, la Galería Fernando Latorre de Madrid (hoy cerrada) o la Galería Punto valenciana y ha participado en colectivas en espacios como la Casa de Vacas madrileña, el Espacio Ibercaja Torrenueva (Zaragoza), la Fundación Antonio Pérez de Cuenca, la Sala Parpalló, La Nau, la Fundación Caja Castellón o la Fundación Bancaja. También en ferias como JustMAD, ARCOmadrid, Arte Santander, ESTAMPA o Gante Artfair.
Asimismo, ha recibido becas del Ayuntamiento de Castellón y el EACC (Habitat Artistic), Piramidon (Barcelona), el Museo Picasso, la Fundación O Barco de Valdeorras o la Fundación Rodríguez Acosta y ha obtenido galardones como el Premio Senyera de Pintura del Ayuntamiento valenciano, el del Ateneo Mercantil de la misma ciudad o una mención de honor en el Premio BMW.
Plana se suma esta semana a nuestros Fichados porque queremos saber más de su producción, en la que conjuga abstracción de composición calculada e improvisación, referencias materiales a lo cotidiano (experimenta en sus soportes y se ha servido de lienzos o de colchones, puertas, toallas) y ecos del expresionismo abstracto. Encontramos en su pintura rebeldía y violencia, desgarro o rabia, trazos que se dirigen al espectador y lo increpan. Esa experimentación, por cierto, tiene que ver con su deseo de crear lo inédito y de expresarse de modo directo y ajeno a tendencias.
Preguntamos a Rebeca por sus inicios y nos ha contado que, en principio, su intención no fue dedicarse a la creación desde la práctica sino desde la investigación, la escritura… En sus estudios, sin embargo, se adentraría en ese “otro lado”: Entré en la Facultad de Bellas Artes San Carlos de Valencia para poder investigar “el hecho de ser creador”. Realmente deseaba convertirme en un “ratón de biblioteca” para poder entender el factor creativo y así ser un buen crítico de arte, historiadora o tal vez comisaria. Pero, a raíz de “ponerme el mono de trabajo”, investigar y realizar mi factor creativo fui adentrándome en materiales, bastidores y pintura. Me licencié en el 2000; de eso hace ya 20 años. Gracias a las galerías, críticos y comisarios he seguido tenaz en mi trabajo pictórico. No soy muy dada a los concursos de arte, aunque soy consciente de su necesidad para ser conocida y reconocida. Pero la vida y la constancia hacen que tu trabajo sea valorado. Un trabajo bien hecho desde el estómago y con alma, pronto o tarde, es descubierto por alguien que defiende el hecho creador. Tu pintura llega para quedarse y afianzarse.
Un trabajo bien hecho desde el estómago y con alma, pronto o tarde, es descubierto por alguien que defiende el hecho creador.
Los intereses de Plana tienen que ver con la propia pintura -ese es su gran medio de trabajo y explora sus límites buscando expandirlos- pero también con lo que, desde fuera de la disciplina, puede aportar a su proceso creativo, desde el medio ambiente a los libros pasando por los mecanismos de composición musicales: Me interesan la improvisación, la música jazzística y la armonía propia de la naturaleza. Todo lo que acontece a mi alrededor suma al hecho de crear. La lectura siempre me acompaña, pero lecturas dispares al hecho creativo.
Normalmente las pinturas de Rebeca se desarrollan en gran formato, pero ha investigado con distintas escalas que permiten diferentes modos de acercamiento al espectador: Trabajo siempre pintura-pintura, de gran formato por una parte y en pequeña escala siempre en papel. Justamente en este momento empiezo a sentirme cómoda en formatos que llamo “take-away”, lienzos de escala inferior, que puedes meter en una maleta, llevarlos en la cabina de un avión. Este formato me lo propuso la Galería Álvaro Alcázar, que me representa; su director, Álvaro Alcázar, tal como un juego de niños, me propuso jugar. Si bien en un principio fue un reto pasar de escala, cada vez me siento más cómoda. Son formatos pequeños y directos. Como pequeños secretos que cuentas, y siempre están en la mente de quien te escucha. Secretos que pronto o tarde se revelarán. Encontrar es aprender más; esta investigación será ejecutada en mi refugio taller para salir hacia el nuevo apasionado del arte. Donde nada escapará. Un reflejo hacia una visión más moderna, basada en la esencia del buen hacer, de la pintura-pintura. Pasión, fuerza y estilo propio aprehendido. Considero que estos trabajos pueden ser el camino…
Entre sus referencias cita a expresionistas abstractos, a la gran fuente creativa que ha sido el Mediterráneo y a autores de su generación: Mi trabajo pictórico está ligado plenamente a los irascibles de 1950 (Robert Motherwell, William Baziotes, Mark Rothko, Pollock, De Kooning…). Tampoco puedo evitar la ligazón mediterránea, el acogimiento y el calor. Me interesa cualquier tipo de pintura pues de ellas aprendo. También, cómo no, mis propios compañeros pintores son una fuente de inspiración para mí. Muchas veces encuentro en ellos la solución definitiva a mi propio trabajo, adaptándolo a mi trazo tan característico. Hemos de ser conscientes de que, gracias a la red, en un nanosegundo tu solución está. La ha aportado cualquier creativo de otra parte del mundo. Ser moderno en tu trabajo es esto. Contemporáneo a tus contemporáneos.
Entre los proyectos fundamentales desarrollados hasta ahora por Plana se encuentra la muestra “Riu”, que hasta el pasado febrero pudo verse en la Sala Martínez Guerricabeitia del Centre Cultural La Nau de la Universidad de Valencia. El nexo de los trabajos de los que constaba la exposición era el río Júcar, al que la artista prestó atención como fuerza de la naturaleza, creadora o destructora, fijándose también en sus tonalidades y vibraciones. Los ríos han sido, para artistas y filósofos, espacios de reflexión, metáfora de vida… el Júcar, próximo a su estudio en Albalat, también lo fue para Rebeca, que creció junto a él; en ese sentido, recoge su pálpito y vida que puede sentir cercanos, con una energía y garra que hace imposible toda impostura.
En “Riu” reivindicaba la naturaleza, su estudio y protección (La força de la natura, se titulaba una de sus obras, de gran formato y central de la exposición); su fuerza (Tempesta nació tras una gota fría) o la luz del propio Júcar (Elogi del Xúquer).
En 2014 y en La Gallera presentó “Top Control”, compendio de una década de trabajo. Sobre aquella exposición, en la que las obras dialogaban o se confrontaban con la arquitectura peculiar de este espacio, escribió Castro Flórez que Rebeca Plana pinta, hay que decirlo con toda la sencillez posible, lo Real que es esa cosa que apenas podemos imaginar. Conviene tener presente que lo real no tiene orden.
Se mostraron pinturas en soportes diversos influidas por el informalismo o el neoexpresionismo, de trazos muy enérgicos y grandes empastes, y sin embargo íntimas: cobijaban ira e ironía, estados de ánimo que esta autora traslada a sus piezas desde su puesta en cuestión o desde el ímpetu. Sus gestos son materia y son escritura de sentimientos o de libertad.
Hemos preguntado a Rebeca por sus próximos pasos: Ante todo creer en uno mismo y en las personas que son capaces de defender tu trabajo (confío mucho en los galeristas y en las galerías).
La situación de la pandemia ha cambiado mucho nuestro panorama. Pronto serán la feria ESTAMPA (Madrid), la Feria MARTE (Castellón), donde soy artista invitada, y el 40º aniversario de ARCO, en el que me hace mucho ilusión participar, junto a mi galería. También en este ARCO, atípico por la COVID-19, estarán galerías con las cuales he colaborado o trabajado durante años. De momento el proyecto más cercano es una colectiva de artistas de la Galería Álvaro Alcázar, un proyecto con un sabor especial. Verá la luz en noviembre.
Colaboro también con la Galería Benlliure de Valencia y se suman futuros proyectos con galerías internacionales, así como un proyecto innovador y sorprendente de arte modular “infinito” que será presentado en breve y deseo que sea un boom dentro del coleccionismo de arte, en el que están implicados artistas de nivel nacional e internacional y en el que estoy encantada de participar.
Por último, junto al comisario y critico de arte Jesús Cámara estoy trabajando para una exposición individual a realizar en el 2021 que ya os iré avanzando, una exposición site-specific donde tengo puesta mi energía. Deseo que llegue a buen puerto pues es un reto para mí, como pintora que soy, defensora del trabajo en obra bidimensional.
Termino recalcando que nada escapa a la improvisación: como en una buena pintura abstracta, todo es colocado de una manera consciente, pero en consecuencia el resultado parece ser propuesto para resaltar el hecho de que no lo es. Como siempre digo: la pintura es un acto de fe.
Conoced mejor la obra de Rebeca, aquí: https://rebecaplana.wordpress.com/