NOMBRE: Nieves
APELLIDOS: Mingueza
LUGAR DE NACIMIENTO: Valencia
PROFESIÓN: Artista
La fotografía regresa a Fichados. A Nieves Mingueza la descubrimos hace un par de años en la Galería 6mas1: participaba en una muestra colectiva que formaba parte del programa de PHotoESPAÑA, llamada “Entre mundo y juguete”. En ella, junto a Patricia Gómez, María Jesús González y Rebecca Wilton, hablaba de memoria, disoluciones de recuerdos y entornos domésticos.
Nieves vive y trabaja en Londres y viene desarrollando, desde hace más o menos siete años, una carrera internacional que le ha llevado a exponer, este mismo año, en Les Rencontres de la photographie de Arlés y en la Fondazione Giorgio Cini de Venecia (tras resultar finalista en el Alpine Fellowship Visual Arts Prize) y, con anterioridad, en la Tate Britain, la Saatchi Gallery y otras galerías de la capital británica, el Royal College of Art y la Royal Academy londinenses. Había empezado a crear antes, pero de su producción anterior y de cómo la entendía va a hablarnos ella más adelante.
Tenemos debilidad por las imágenes en blanco y negro que hablan de tiempos perdidos, que quizá están fragmentadas o mal conservadas, y que proporcionan, sobre el pasado y sobre nosotros mismos, claves que desconocíamos. Son elementos a menudo presentes en la producción de Mingueza, por eso ella es nuestra última fichada antes de las vacaciones: queremos que conozcáis su trabajo de arqueología y creación fotográfica y la combinación poética en su obra de lo visual y lo textual.
Como es habitual en esta sección, le hemos preguntado por sus comienzos creativos, en su caso tempranos. Paladea desde niña los placeres del hallazgo de imágenes inesperadas y las observa minuciosamente para concederles vida nueva. También desde entonces las vincula a los relatos: Desde niña me recuerdo conectada con el arte y los procesos creativos, en general. En la escuela me encargaba de decorar los murales de las paredes de mi clase: dibujaba, pintaba y escribía según el tema didáctico que me proponía la profesora.
En casa me empapaba de imágenes que me encontraba en las típicas y voluminosas enciclopedias de la época; me acuerdo de un libro sobre las Siete maravillas del mundo, fascinándome con las pirámides de Egipto y el Coloso de Rodas. También recuerdo una enciclopedia sobre el arte en el Renacimiento que me hipnotizaba, ahí descubrí los estudios anatómicos de Leonardo da Vinci y algunos retratos de perfil de damas renacentistas que adoraba.
Me rodeaba de los álbumes de fotos de mi familia, y miraba y auscultaba todos los detalles de la ropa, los paisajes, las miradas… Mi profesora de literatura me alentaba a escribir, incluso me presentaba a concursos de escritura que había en aquella época, y conseguí algunos premios.
Ese fue mi primer acercamiento al arte y la literatura. Me pasaba el día dibujando, escribiendo e inventando con mis hermanas. Vivíamos en una ciudad pequeña y una época provinciana, con una disciplina férrea en casa y también en el colegio de monjas, así que la única opción al alcance de nuestra mano para divertirnos era hacer uso de nuestra imaginación.
Posteriormente, ya siendo adulta, siempre me recuerdo con un lápiz en la mano, dibujando, escribiendo pequeños poemas, haciendo fotos y collages de papel, tomando notas o creando narrativas.
Soy autodidacta por naturaleza, así que no he tenido que desaprender corsés académicos. Ahora lo valoro, ello ha permitido que mi trabajo crezca en el campo independiente y experimental, guiándome por mis instintos e intuición.
Finalmente decidí tomarme un poco más en serio a mi misma en mi faceta artística, y empecé a compartir mi trabajo hace unos siete años; lo anterior yace en cajas, carpetas o desapareció en bolsas de basura.
En su caso, las imágenes (representaciones) son el punto de partida para explorar las esencias, asuntos de interés universal y humano, y también la memoria y las fronteras (nos da por pensar que cada vez más frágiles, con el tiempo) entre lo real y lo imaginado: Considero que el concepto de condición humana forma parte de mis temas recurrentes. Estoy interesada en explorar las claves que constituyen la esencia de la existencia, tales como el nacimiento, el origen o la familia, las emociones, los conflictos y la muerte.
Se trata de un discurso narrativo en femenino, donde se dan cita diferentes variaciones, yuxtaposiciones o círculos concéntricos en torno a esa idea de la condición humana. Añadiría que me interesa experimentar y reflexionar en torno a un determinado espacio que yo denomino la delgada línea entre ficción y realidad.
A la hora de elegir referentes, Nieves los elige fílmicos y literarios, pero también vitales: una de las ventajas que le proporciona vivir en Londres es tener a mano un sinfín de mercadillos y rincones donde encontrar objetos olvidados capaces de inspirar historias y reflexiones sobre lo que fuimos y lo que dejamos a un lado: Yo diría que el cine es mi principal fuente de inspiración. A veces pienso que desearía no haber visto todavía mis películas favoritas, así tendría la oportunidad de experimentar de nuevo la enorme sensación y el gran impacto que me provocaron cuando las vi por primera vez.
Adoro a Duras, Buñuel, Bergman, Rossellini, Bresson, Tarkovsky, Lynch, Deren, Tarr, Dreyer, Matsumoto, Maddin, Brothers Quay, C. Marker, J. Mekas, Akerman, B.Conner… y así podría seguir nombrando muchos directores cuya obra me fascina. También disfruto mucho del cine experimental desde sus orígenes hasta nuestros días.
Respecto a las corrientes artísticas al uso, respeto enormemente y siempre he sentido una gran admiración por la primera etapa del surrealismo, incluyendo sus diferentes facetas: literatura, artes visuales y cine. También conecto con la vanguardia y la Bauhaus.
Después, añadiría que la música añade adjetivos a mis días. Mi obra contiene todos esos sonidos, fundamentalmente, porque yo siempre trabajo escuchando música, es una de mis más poderosas fuentes de inspiración. En literatura, fundamentalmente leo libros escritos por mujeres. Entre mis referencias, incluiría a Virginia Woolf, Anais Nin, Sylvia Plath, Anne Sexton, Unica Zurn, Pizarnik y Joyce Mansour, entre otras, y mi adicción crece en torno a la literatura femenina, siempre estoy descubriendo nuevas autoras contemporáneas que me encantan.
Finalmente, me encanta rodearme de objetos que me acompañan en mi proceso creativo. Una de las razones por la que me gusta la ciudad en la que vivo actualmente, Londres, es que puedo alimentar mi fetichismo y encontrar objetos sorprendentes en mercados y tiendas de segunda mano.
Como ya habréis adivinado, la fotografía es la disciplina fundamental en la que trabaja Mingueza, aunque no siempre lo haga con imágenes propias. Lo sean o no, sus procesos no son improvisados y en algunos introduce narratividad: Siempre trabajo en analógico –film 35mm- y ahora voy a empezar a experimentar con 120mm. Utilizo varias cámaras antiguas que me ofrecen diferentes matices, grano e intensidad, según el resultado que busque. Suelo trabajar en blanco y negro, aunque en algunos proyectos he incluido tímidamente algo de color.
También elaboro collages; previamente hay una fase de búsqueda de papeles en mercadillos y tiendas varias, cuando encuentro algo que me gusta, me apodero de ello y lo voy acumulando en cajas, hasta que llega el momento de iniciar un nuevo proyecto. Entonces, rescato los libros y las revistas antiguas que he ido atesorando y los ensamblo, algunos trabajos son puramente collages y en otras ocasiones hago uso de fotografías propias que mezclo con papeles a modo de collage, mayoritariamente en blanco y negro también. Adicionalmente, en algunos proyectos incorporo pequeños dibujos, palabras o poemas.
Actualmente, ambos formatos, tanto la fotografía como el collage, son igualmente importantes para mí. Elegí la fotografía analógica porque adoro la magia de los negativos y por mi profunda afinidad con el cine: es un medio de expresión con el que puedo experimentar y jugar, y sorprenderme con los resultados finales.
Sin embargo, hay otros proyectos en los que deseo una narrativa específica, que no puedo obtener a través de fotos, entonces acudo al collage. Mi último proyecto, titulado Here I Am, es un ejemplo. En este trabajo, yo quería explorar el autismo en la infancia; es un tema que me conmueve y con el que siento una profunda conexión debido a mi profesión. Claramente, entendí que el medio para transmitir mis emociones y sensaciones era a través del collage, puesto que considero que es mucho más respetuoso mostrar protagonistas anónimos, que desarrollar el proyecto con fotos reales y actuales de niños y niñas.
Elegí la técnica del collage porque adoro el acto de buscar piezas antiguas de papel, incluyendo libros, revistas, fotos, postales, etc, que toco, huelo y acumulo en cajas, y después, cuando llega el momento, las recorto y manipulo para obtener la imagen deseada.
A la hora de citar sus series fundamentales (podemos ver una veintena en su web), Nieves comienza precisamente por Here I Am, la más reciente, dedicada, como nos contaba, al autismo infantil: Se trata de una serie de 19 collages y un poema, donde se muestra un retrato sensible y no invasivo del autismo en la niñez.
Las imágenes de Here I Am están inspiradas en mi experiencia profesional en una escuela para estudiantes con necesidades especiales en el sur de Londres. Con la ayuda narrativa de un micropoema, las estoy relacionando con una amplia gama de emociones, sentimientos y pensamientos profundos.
Las imágenes de Here I Am han podido verse en los Rencontres de Arlés y en la Fondazione Cini de Venecia y le han valido a la artista el Alpine Fellowship Visual Arts Prize, que este año comisariaba Julian Spalding y estaba dedicado a la infancia.
Otro de sus proyectos preferidos es I will tell you a story, but later, el que pudimos ver en 2016 en 6mas1, bajo el comisariado de Francisco Ramallo: Es un proyecto de fotografía, con negativos en blanco y negro, donde hice uso de una narrativa experimental y en donde las imágenes, más que a fotos, se asemejan a fotogramas de una película de cine.
En colaboración con la británica University of Hertfordshire UH Arts and Dance East, en 2016 llevó a cabo Nieves Snow falling son, que combina collage e imagen propia: En esta ocasión deseaba experimentar con el movimiento y la estética de la danza; las fotografías fueron tomadas en una cripta de una iglesia en el este de Londres y se combinaron con piezas de papel de unas revistas de astrología de los sesenta. Este proyecto fue seleccionado y expuesto en la Royal Academy of Arts, dentro de la “Summer Exhibition” de 2016, y se incluyó en SHOTS Magazine.
Como buena melómana, también ha colaborado en proyectos discográficos, entre otros, de los sellos Fluid Audio y Dronarivm y en los discos Branches de Cyril Secq y Orla Wren, En el submarino de Los Esclavos, Psychology of Colour de Ouvala, Context de Hotel Neon o The Epiphanies de Bill Seaman. Y lo ha hecho, además, en algunas publicaciones, como Vogue Italia, Yet Magazine, Eyemazing Editions, Sarmad Magazine, L´oeil de la photographie, Phases Magazine, Witty Kiwi, Square Magazine, Shots Magazine o Low Light Magazine.
Nos cuenta Nieves, por último, lo próximo. Pronto veremos su obra en España: Actualmente estoy preparando una exposición individual en Espai La Rambleta, Valencia, en donde presentaré mi último proyecto, Here I Am. La inauguración de la exposición será el día 20 de diciembre 2018 y se podrá visitar hasta el 4 de enero 2019. Realmente me hace muy feliz poder compartir mi trabajo en la ciudad donde nací, y reencontrarme con familia, amistades, y amantes del arte, recuerdos, olores, sabores…es una mezcla de intensos sentimientos, así que doy gracias por esta oportunidad.
Asimismo, una editorial que admiro enormemente me ha propuesto publicar un libro con mi último proyecto, esto será el año que viene. Finalmente, existe un nuevo proyecto rondándome, tengo la semilla, la idea fundamental y las primeras anotaciones; estoy deseando ponerme a trabajar a fondo con ello
Podemos seguir atentos aquí: nievesmingueza.com