La Fundación Juan March presenta, a partir del 4 de febrero, otra de sus pequeñas muestras de gabinete ya habituales: será “Tres escultores ingleses (1952-1982”, que ha nacido del trabajo sobre el arte británico que ya culminó, en 2012 en esta misma institución, con la exposición “La isla del tesoro. Arte británico de Holbein a Hockney”. Este proyecto reunirá algunas obras de Henry Moore, Barbara Hepworth y Anthony Caro, tres de los grandes artífices de la renovación escultórica que tuvo lugar en Gran Bretaña a partir de los años treinta.
La selección de piezas que ofrecerá esta exposición procede de colecciones particulares: veremos esculturas y grabados de Moore con algunos de sus temas recurrentes: la figura reclinada y la madre y el niño; trabajos de Hepworth tanto de líneas arcaicas primitivistas como más abstractos, y dos obras de Caro: Table Piece CCLXXI [Pieza de mesa CCLXXI], (1975-76), que pertenece a la serie del mismo título que el artista comenzó en los años sesenta, en la que utilizó el ensamblaje como medio de construcción y desarrolló las múltiples posibilidades existentes bajo el común denominador de tener una mesa como soporte, y Sin título (1982-83), reflejo de los cambios que se produjeron en su trabajo a partir de la década de los setenta por sus contornos más complejos y estructuras más tupidas.
Ya el 26 de marzo, llegará a la Fundación la exposición “EL GUSTO MODERNO. Art déco en París, 1910-1935”, que no será tanto una exposición de “artes decorativas” como un desafío a la tradicional separación entre las bellas artes y las artes decorativas y aplicadas, tan propia de nuestra conciencia estética. Se cuestionará la casi total ausencia del art déco en la historia del arte y se reivindicará el revival déco que se produjo a partir de los años setenta.
La muestra se estructurará en varias secciones, cronológicas y temáticas, y combinará reconstrucciones y recreaciones con casi trescientas piezas de pintura, escultura, mobiliario, moda, joyería, perfumería encuadernaciones, fotografías, cine, arquitectura, vidrio, cerámica, laca, orfebrería, tejidos, dibujos, planos, maquetas, publicidad y revistas.
Por último, entre el 22 de julio y el 19 de septiembre se presentará, como exposición de verano en la Fundación Juan March, “Josep M. Sert: recuerdos y evocaciones”, que mostrará al público por primera vez Los recuerdos maravillosos y las Evocaciones españolas de Josep Maria Sert.
Los recuerdos maravillosos es un conjunto de quince tablas pintadas al óleo en 1916 que el barcelonés realizó bajo la influencia de Velázquez y especialmente de Goya. Fue un encargo del pionero británico del ferrocarril, Sir Saxton Noble, para el comedor de su residencia en Wrethan Hall, en Norfolk.
Por su parte, el conjunto de los cinco biombos que componen las Evocaciones españolas es una obra de madurez que, con marcada intención decorativa, Sert realizó en 1942 para revestir los muros de la sala de música de la residencia madrileña de Juan March. Se trata de escenas llenas de movimiento y fantasía donde los personajes se acumulan en escorzo en dinámicas composiciones.
Se considera que, trabajando al margen de las vanguardias, Sert renovó la pintura mural y se dio a conocer por la decoración de grandes superficies. Idealizó el folclore español, inspirado en la pintura manierista y barroca, y su obra está especialmente influida por Goya, del que asumió el gusto por los temas populares y costumbristas de marcado carácter escenográfico.
