El tránsito de Eduardo Stupía

El artista argentino expone en el IVAM su obra más reciente

Cuarenta y siete obras de Eduardo Stupía, entre pinturas y dibujos, todas ellas fechadas en 2008 y 2009, se muestran en el Instituto Valenciano de Arte Moderno probando la espectacular evolución en la trayectoria del argentino desde los llamativos cómics que realizó a comienzos de la década de los setenta hasta el día de hoy.

Líneas, filigranas, manchas y pinceladas invitan al espectador a reinterpretar desde la fantasía los dibujos de Stupía, que ya no presentan personajes y objetos ubicados en paisajes fantasmales como en su primera época, sino tramas visuales complejas en las que adivinamos la existencia latente de ciudades escondidas o edificaciones tan barrocas como imposibles.

La experimentación con las tintas y con el granulado y la textura del papel tienen como fruto en la producción de Stupía dibujos sobrecargados de huellas, trazos y líneas donde aparecen abismos vacíos en cuya atmósfera silenciosa se trata de sumergir al público.

En ocasiones, un único núcleo organiza el resto del espacio de la obra a modo de relato visual; otras veces, los núcleos son múltiples y la tensión de la pieza se equilibra entre sus partes. El conjunto de la obra de Stupía puede concebirse como un gran organismo en el que dibujo equivale a pensamiento, lo que convierte a sus trabajos en manifestaciones tan poéticas como inquietantes de ese pensamiento.