El Prado se renueva por dentro

Olvidada esta polémica y con las nuevas salas a pleno rendimiento, la pinacoteca madrileña ha presentado estos días el proyecto de reestructuración de su colección permanente. Tras la inauguración ya han sido liberadas 25 de las salas del edificio Villanueva, gracias a lo que se podrá ampliar en cerca de 500 el número de obras que actualmente se exponen. La colocación de las obras y la proyección de las salas se llevará acabo de forma paulatina y sin que afecte al funcionamiento normal del Prado, como ha dado a conocer a los medios el Conservador Jefe del Museo, Gabriele Finaldi, y no tocará su fin hasta el año 2012. El recorrido propuesto estará estructurado de forma ordenada cronológicamente y por escuelas, y ha sido pensado para que en una visita realizada de norte a sur, a lo largo de los tres pisos del edificio, se contemplen las obras maestras del museo; empezando por los frescos románicos para finalizar en las piezas del s. XIX, sin duda las grandes protagonistas de esta ampliación. Estas emblemáticas piezas decimonónicas que el Prado guarda entre sus fondos, y que llevaban años sin ser exhibidas a causa de la prolongada restauración del Casón del Buen Retiro, donde antes se mostraban, está previsto que se instalen en las salas del edificio Villanueva durante el mes de septiembre. Para facilitar la visita, el Museo Nacional del Prado también ha presentado su primera guía oficial; una útil herramienta que propone un recorrido a través de la colección y sus grandes maestros, en el que se señalan 400 de las obras más importantes de la pinacoteca, teniendo en cuenta la que disposición que tendrán las piezas en un futuro.

Vista de las nuevas salas de exposiciones