El Museo Sorolla, estatal y dependiente del Ministerio de Cultura, cerrará sus puertas temporalmente desde el 1 de octubre para emprender su ampliación arquitectónica y su rehabilitación, un proyecto al que se destinará una inversión total de 6,5 millones de euros y que estará diseñado y dirigido por el estudio Nieto Sobejano Arquitectos.
Se dotará al Museo de una superficie de 2.000 nuevos metros cuadrados, colindantes con el actual centro, mientras que el edificio histórico de Martínez Campos será sometido a una rehabilitación integral para paliar su desgaste: en el futuro mantendrá sus funciones expositivas y se preservará el carácter original de sus espacios, restaurando los elementos históricos de la casa Sorolla, renovándose sus instalaciones y dotando de sistemas de control medioambiental a todas las zonas de exhibición de bienes culturales, por motivos de conservación.
Además, y dado que a día de hoy el Museo Sorolla no es accesible para personas con movilidad reducida o discapacidad motora, se dotará a la institución, tanto en los espacios de la ampliación como en la Casa Museo, de las condiciones de accesibilidad necesarias para atender las demandas del público.
Hay que tener en cuenta que el Museo Sorolla se emplaza en la antigua residencia familiar y taller del pintor valenciano, construida por Enrique María de Repullés en el año 1911; se trata de una casa museo que mantiene, por tanto, los espacios y ambientes originales de la vivienda y estudios del autor. Esas circunstancias han generado limitaciones en la distribución espacial y funcional del edificio desde su conversión en museo en 1931, además de implicar el poderoso atractivo de poder conocer la casa del pintor tal y como él y su familia la habitaron. En la actualidad, el centro no dispone de espacios adecuados para albergar, por ejemplo, un taller de restauración, un almacén de bienes culturales, talleres didácticos, salas de muestras temporales, un salón de actos, un área de acogida de grupos o un muelle de carga de bienes culturales, entre otras estancias habituales de una infraestructura museística, aunque progresivamente, desde los años cuarenta, se han creado salas de exposición en la primera planta de la casa, se ha remodelado parcialmente la escalera doméstica, se ha dispuesto una sala de dibujos, se estructuraron distintas salas de exposición luego convertidas en almacenes de bienes culturales, se han restaurado los jardines y, ya en los 2000, se acometió una remodelación museográfica y se dotó de sistemas de climatización a los estudios. Fueron, en todo caso siempre, intervenciones parciales; la que se emprenderá este otoño será la primera global.
Los tres objetivos fundamentales de la próxima ampliación-rehabilitación del Museo Sorolla serán, así, la ampliación del centro con unas instalaciones complementarias y contemporáneas que permitan desarrollar todas sus funciones normal y eficazmente; la rehabilitación de los espacios originales de la Casa Museo que, por el paso del tiempo, la obsolescencia de las instalaciones o la falta de algunas infraestructuras, necesitan una intervención; y conferir accesibilidad al edificio.
Esta previsto que se acometa una actuación integral en el local de la ampliación (el número 68 de la calle Zurbano) para su adecuación a uso museístico, contando con nuevos espacios y servicios (sala de exposiciones temporales, almacén de bienes culturales, taller de restauración, salón de actos, muelle de carga de bienes culturales, etc.); que se rehabiliten y restauren elementos históricos de la Casa Museo; que se distribuyan nuevos usos para los espacios con los que contará el centro (tanto en la Casa Museo como en la ampliación); y que se integren las tres áreas con que cuenta el Museo (Casa Museo, oficinas, local de ampliación) desde el punto de vista de las conexiones, las circulaciones y la accesibilidad.
El renovado Museo Sorolla, que tendrá una superficie de unos 5.500 metros cuadrados (más del doble que la actual), abrirá sus puertas, según lo previsto, a comienzos de 2026.
