El arte como antídoto

Comisario: Bartomeu Marí.

La utilización y manipulación de las imágenes empleadas en los medios de comunicación de masas es el principal objeto de estudio de la obra de Joan Rabascall, artista barcelonés cuya producción fechada entre los años sesenta y ochenta será analizada hasta el 19 de abril en la nueva exposición del MACBA. En contraposición con la fascinación por la publicidad y el objeto industrial que priman en la cultura pop norteamericana, el artista catalán se muestra abiertamente crítico con el consumismo imperante en la sociedad europea de aquel tiempo. En conexión con grupos de vanguardia como el Independent Group británico o el Nouveau Réalisme francés, decidió recuperar las fórmulas de representación y las ideas estéticas y éticas del Dadaísmo alemán, pero la crítica social y de denuncia política que caracterizan sus trabajos, del mismo modo que marcaron los del grupo dadaísta, se han manifestado en la obra de Rabascall en la exploración profunda de la dependencia de la cultura contemporánea respecto a la política, la moda o la economía, tomando como mayor ejemplo la politización de las manifestaciones culturales en la etapa franquista y la huella del turismo en lenguas y paisajes. Lo vemos especialmente en las telas que componen Spain is different (1973-1977), en las que quedan patentes los contrastes entre el aperturismo que conlleva la voluntad de promoción turística de la campaña que llevó tal nombre y la realidad social de nuestro país en aquella época.

La exposición que podremos contemplar en Barcelona se articula en torno a diversas series en las que el creador catalán profundiza en torno a la problemática generada en la creación y transmisión de imágenes de cualquier tipo desde un punto de vista altamente crítico, sobre todo en relación al encantamiento que producen en el espectador y el modo subliminal en el que le inducen al consumo de un producto o a comulgar con determinados estereotipos sociales rechazables (visión de la mujer como objeto sexual, apología de la violencia y del armamento) o discutibles (estilo de vida americano como paradigma de felicidad, informatización del poder o del conocimiento, exaltación de la cultura del ocio). A través de Mass Media (1967), Obsesión (1964), Atomic Kiss (1968) o Textes (1972-1973), ironiza sobre una racionalidad contemporánea que considera regida por valores absurdos.

Así mismo, forman parte de la muestra la instalación inédita Bandera olímpica, ideada con motivo de los JJ.OO de Munich de 1972 pero no expuesta hasta la fecha por el atentado terrorista que truncó el desarrollo de aquel evento y las proyecciones desincronizadas de Elecciones Show (1977-1978). En la primera analiza la vertiente comercial del deporte y los intereses políticos y económicos que confluyen en todas las Olimpiadas; en la segunda revive la expectación en torno a las primeros comicios democráticos celebrados en España.

El propósito último de esta exhibición, que lleva por nombre “Rabascall. Producció 1964-1982” es dar a conocer en nuestro país la obra del barcelonés, ampliamente difundida en Francia desde los setenta pero sólo presentada en España en tres ocasiones y a partir de 1985.

Joan Rabascall. Imperfect Crime, 1965
© Joan Rabascall, VEGAP, 2008

Joan Rabascall. IBM 360, 1967
Camilla Hamm. Foto de: Seber Ugarte