En 1995 abre al público el Centro de Arte La Estancia como escenario alterno para la acción cultural de Petróleos de Venezuela, orientado hacia el estudio y la difusión de manifestaciones en el campo del diseño y la fotografía, así como de actividades vinculadas con la música y las artes escénicas, para atender así la demanda cultural de sus visitantes. Esta programación alternativa le ha permitido cumplir un importante papel en la vida de la ciudad de Caracas, al ofrecer exposiciones y espectáculos gratuitos de gran calidad, considerados referencia fundamental en la agenda artística de la capital.

El Centro de Arte La Estancia ocupa una hermosa casona que formaba parte de la antigua hacienda La Floresta, cuya fundación se registra en 1783 con el propósito de iniciar la introducción del café en la capital de lo que era la Capitanía General de Venezuela. La hacienda La Floresta se mantuvo dedicada a la actividad cafetalera hasta 1944, período durante el cual tuvo diferentes dueños, hasta 1988, cuando fue adquirida por Petróleos de Venezuela. Enclavado en la avenida Francisco de Miranda, el Centro de Arte La Estancia ha sido declarado Monumento Histórico de la Nación, conjuga el legado de la época colonial expresado en la arquitectura de su planta física, con lo más innovador en diseño y tecnología.