Habiendo iniciando su trayectoria en la década de los setenta con obras conceptuales, cercanas a Juan Hidalgo o Rufo Criado , Noguera evoluciona, sin embargo, hacia los presupuestos de los artistas visuales de la generación de los noventa, coincidiendo con ellos en una toma de posición ambigua frente al orden establecido. Sin las connotaciones políticas de Beuys , ni el pragmatismo de Manzoni ., sus trabajos multimedia video, performance- suponen una crónica del desencanto y una reflexión crítica del conformismo de la sociedad actual. Destacan sus exposiciones, acciones e instalaciones, El color m´afecta, Fundación Espais, Gerona, Vidre glaÇat. El gos s´enterra sol, Museu d´Art de Girona, 1999, Flama horitzontal. Grafies escèniques, Teatro de Olot, y Bastiment i Pedral, Factoría de les Arts, Olot, 2000, El joc és la dimensió, Galería 44, Barcelona, Espejos de la imagen. Una historia del retrato en España, Explorafoto, Salamanca y Més tot allò/Dibuix a la cuixa, Centre d´Art Sta. Mónica, Barcelona, 2001, Terre de Ningú, Fundación Sa Nostra, Ibiza, Perception Museo de Arte Moderno de Dubrovnik, Croacia, y Festival de poesía y acció Pirinaigua, 2002.