A las cerámicas, muy próximas a lo orgánico, de Miquel Barceló les sucede en la Fundació Catalunya La Pedrera -con sede en la Casa Milá de Gaudí, emblemático edificio en piedra representativo de la modernidad arquitectónica en Barcelona- una muestra dedicada a la presencia de ese material en la escultura del siglo XX; se dice, y es cierto, que esta época ha supuesto para esa disciplina una extraordinaria apertura en cuanto a materias primas y rasgos formales, y la irrupción de todo tipo de elementos como componentes posibles, incluyendo los blandos y los efímeros, pero también lo es que la piedra, a la que desde la antigüedad hemos concedido numerosos valores sociales y simbólicos y que siempre hemos considerado sinónimo de solidez y eternidad, continuó siendo terreno a domar por parte de figuras fundamentales como Jean Arp, Louise Bourgeois, Eduardo Chillida, Naum Gabo, Barbara Hepworth, Henry Moore, Isamu Noguchi o Jorge Oteiza.
Todos ellos se encuentran representados en la exhibición “Arte en piedra”, que podemos visitar hasta el 2 de febrero del próximo año y que recuerda cómo, en las primeras décadas del siglo pasado, no fueron pocos los escultores que se decidieron a tallarla de manera directa sin recurrir a intermediarios: en lugar de servirse primero de arcilla y yeso, procedimiento habitual en el pasado, y que fueran después técnicos expertos quienes se encargaran de elaborar la pieza definitiva, estos artistas decidieron convertirse en dueños del proceso, prescindir de pruebas y generar por sí mismos sus obras pétreas, abstractas.
El hecho de que los suyos no fuesen trabajos figurativos no restaba valor a su desafío: esas creaciones implicaban un conocimiento profundo de este material, y el desciframiento, por su propia mano, de sus significados y potencialidades. Su punto de partida, en lo físico, es el mismo que el de los maestros antiguos, pero su concepción del objeto escultórico y sus formas será del todo distinta: adquiere protagonismo el muy inesperado vacío, convertido en elemento de composición volumétrica, en una parte más de estas estructuras; además, los proyectos monumentales tendrán en cuenta siempre el espacio que los rodea, sea este interior o exterior, y nunca más serán propuestas aisladas, sencillamente exentas.
A mediados de siglo se produjo un paulatino cambio en favor de la flexibilidad: a fines de los cincuenta y en los sesenta, tanto en Europa como en Estados Unidos, los citados Hepworth, Moore, Arp, Gabo, Noguchi, Bourgeois, Chillida y Oteiza decidieron ganar libertad y tiempo para diseñar sus piezas cediendo a tallistas profesionales su materialización técnica; así, además, podían verse menos constreñidos a la hora de esbozar formas e, incluso, seleccionar piedras más duras.
Ha comisariado este proyecto Penélope Curtis, gran experta en escultura contemporánea y exdirectora de la Tate Britain de Londres y del Museu Calouste Gulbenkian de Lisboa, y son cerca de ochenta las obras reunidas, pertenecientes tanto a esas figuras históricas, cuyos nexos de unión y confluencias se señalarán, como a autores de generaciones posteriores que emplearon la piedra para explorar nuevos desarrollos conceptuales, caso de Xavier Corberó, Stephen Cox, Luciano Fabro, Barry Flanagan, Cristina Iglesias, Anish Kapoor, Ettore Spalletti y Alison Wilding.
El montaje se completa con fotografías que Aglaia Konrad ha realizado en las canteras de Carrara y, como es habitual en las exhibiciones de La Pedrera, con distintas actividades en varios escenarios barceloneses: jornadas de conferencias y la proyección de un documental sobre los modos de hacer de Barbara Hepworth en la propia Casa Milà, un recital de Mahan Esfahani en el Foyer del Liceu, un concierto de Júlia Colom en las canteras menorquinas de S´Hostal, una visita dialogada en torno a la piedra en el Museu d´Arqueologia de Catalunya, la performance La danza del ónix en el Pabellón Mies van der Rohe y un estreno de Raquel García-Tomás en el Palau de la Música Catalana.
“Arte en piedra”
Passeig de Gràcia, 92
Barcelona
Del 4 de octubre de 2024 al 2 de febrero de 2025
