Antonio M. Xoubanova: un universo en diez metros lineales

Muchos de vosotros conoceréis a Antonio M. Xoubanova como uno de los fundadores del colectivo Blankpaper o a raíz de sus colaboraciones en medios como GEO, Herald Tribune, New York Times, DAZED, PDN, El Semanal, Yo Dona o El Mundo. Este fotógrafo madrileño, que comenzó a formarse en Turismo para después reorientar sus pasos en la Escuela de Arte 10, recibió en 2007 una beca de la Fundación La Caixa para llevar a cabo su proyecto M30 y también fue becado por el Ministerio para trabajar en el Colegio de España en Paris y fue nominado para el National Media Museum First Book Award y seleccionado para el Campus de PhotoEspaña Edición de Libros.

Hasta el 20 de mayo, Xoubanova se estrena en la Galería Ángeles Baños con “Un Universo Pequeño”, un proyecto en el que ha tratado de condensar su imaginario e intereses en 1,5 segundos y diez metros de calle, lineales. ¿Cómo? A través de un cortometraje que sólo dura un segundo y medio y que está formado por imágenes alusivas a la condición humana en el mundo contemporáneo, la publicidad, la muerte, la religión, la tecnología, el amor, el principio de las cosas, la materia y sus formas, en definitiva, a nuestras preguntas más elementales.

En esos metros y ese escaso tiempo, el artista ha pretendido abordar y a la vez definir, poniendo coto, a su personal “universo”, concreto pero a la vez compuesto por elementos que, por complejos, escapan al control humano.

Las mismas imágenes que integran el filme Xoubanova las ha reunido en un libro donde ocupan mayor o menor espacio en función de su tamaño real y donde se nos presentan como una suerte de contenedores de tiempo. ¿Tiempo entre paginas? Sí, porque, por ejemplo, el fotógrafo nos presenta una imagen realizada a 1/40 seg. de velocidad de obturación a un tamaño diez veces superior al de otra efectuada a 1/400 seg. Esta fórmula tan sencilla a la hora de decidir el tamaño de cada imagen le sirve así para que el espectador comprenda el tiempo que le ha llevado tomar cada instantánea y a su vez para poder materializar algo tan intangible y mínimo como 1,5 segundos de existencia, o un trozo de materia o un espacio reducidísimo.