Alejandra Freymann: primero una montaña

Alejandra Freymann. Primero una montaña, 2013

La artista mexicana presenta en el Centro de Arte Alcobendas pinturas de gran formato y temática natural

Composiciones ambiciosas y de gran envergadura que exploran los campos de color y destacan por su base poética componen la muestra “Primero la montaña” que la artista de origen mexicano residente en España Alejandra Freymann presenta desde mañana en el Centro de Arte Alcobendas.

Freymann se ha formado en la Facultad de Bellas Artes de Cuenca y desde sus inicios ha convertido la pintura y el dibujo en sus medios de expresión fundamentales y ha invitado al espectador a contemplar sus trabajos desde la distancia. Así nos invita la artista a leer estos trabajos:

Primero ves una montaña. Luego, a fuerza de mirarla, dejas de verla. Más adelante, ves la montaña.

El paisaje, desde donde me encuentro, es el espacio que no habito.

Hay un cielo separado de mí. Nubes pesadas como piedras esculpidas sobre el cielo.

El paisaje es aquello que construyo en el espacio entre momentos.

El día que olvide todos sus nombres, empezaré a pintar el paisaje.

Para construir una montaña se necesitan muchas montañas. Un solo punto en el que confluye la totalidad de los elementos. Ese punto existe en cada piedra.

Voy a despertarme en el momento en el que todo se repita.

Hay que adentrarse en el bosque sin camuflar las huellas.

Hay que contar con todos los árboles.

Un árbol y otro y otro. Lo mismo con las piedras y con las hojas.

El agua está por todas partes. Un paisaje y otro y otro.

Caminamos entre las piedras, despacio para no despertarlas.

Alejandra Freymann. Estación (detalle), 2013

Entre las muestras individuales que Freymann ha protagonizado hasta ahora figuran “Cuando los lobos comían niñas tontas” en la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Castilla-La Mancha, Cuenca, (2006), “Out of the blue” en La Casa Encendida el año pasado y otra en la Galería Pepe Cobo & Cía (2009). Además, ha participado en diferentes exposiciones colectivas, como “El color, el tiempo de los ritmos” en el Museo Espacio Escala de Sevilla (2008) o “Ayermañana” en el Museo Casa Zavala de Cuenca (2007); ha sido reconocida con importantes premios y ha realizado el libro de dibujo Todas las cosas del mundo están (aún) por suceder (Ediciones Puré, 2007), así como la exposición “El misterio del perro del sol“, del colectivo The Children Pox, que integra junto a Juan Zamora, en el Museo ABC de Madrid. Su obra se encuentra entre los fondos de las colecciones de la Fundación Caja Sol de Sevilla; la Fundación Antonio Pérez de Cuenca y la Fundación Canaria para el Desarrollo de la Pintura de Las Palmas de Gran Canaria, entre otras.

Alejandra Freymann. Marcelo y yo, 2013

Vive y trabaja en Cuenca y es representada en Madrid por la Galería José Robles. Según Óscar Alonso Molina, toda la fragilidad de las imágenes de Freymann, lo adelanto ya, está sostenida por una fuerza inamovible, articulada con una tensión y una determinación inquietantes, perturbadoras en manos de alguien tan joven como ella. Así ocurre, en efecto, con respecto a las terribles pasiones que maneja allí dentro; o con el chocante mundo de afectos y desencuentros entre el ser humano y las cosas, o entre el ser humano y la naturaleza, que tan a menudo parafrasean sus cuadros y sus dibujos.