Viveiro (Lugo), 1909 – Madrid, 1995.
Pintora española.

Llega a Madrid en 1922 para formarse en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando y en el taller de Julio Moisés. Conoce entonces a Dalí, quien la introduce en el ambiente de la Residencia de Estudiantes. Participa en la Escuela de Vallecas en 1927, junto a Alberto y Benjamín Palencia, y transforma el primer estilo colorista de sus verbenas en obras de paleta más austera y sombría debido a las visiones del paisaje de los alrededores de Madrid: lugares áridos en los que la presencia de huesos y elementos de desecho es constante. La primera exposición tiene lugar en la Revista de Occidente en 1928. Asimismo, se dedica a la ilustración y la escenografía. En 1932 la Junta de Ampliación de Estudios le concede una beca para ir a París; se relaciona entonces con los surrealistas y expone en la Galerie Pierre Cloacas y campanarios. Al volver a Madrid ejerce como profesora en la Escuela de Cerámica y tras esta actividad inicia una etapa más optimista en su pintura que se manifiesta en un colorido más rico en Naturalezas vivas y en composiciones muy estructuradas desde lo geométrico. Junto con Torres García, Moreno Villa, Manuel Ángeles Ortiz, Alberto y Benjamín Palencia, forma parte del Grupo de Arte Constructivo. Se exilia en Buenos Aires desde 1937 a 1965, donde añade a su actividad creadora la de conferenciante. Vuelve a Madrid y en 1982 recibe la Medalla de Oro a las Bellas Artes del Ministerio de Cultura.