Andrés Pachón (Madrid, 1985) es licenciado en Bellas Artes por la Universidad Complutense, lo representa desde hace cuatro años la Galería Ángeles Baños de Badajoz, ha participado en ferias como ArteSantander 2010, Foro Sur 2011 o JustMad 4 y es autor de intervenciones infográficas y fotomontajes realizados a partir de documentos fotográficos y videográficos originales.
Las imágenes resultantes Pachón nos las presenta como un documento nuevo que desvela las ficciones y fantasías de estudios que comúnmente damos como verídicos.
En el último año, este artista ha centrado sus investigaciones teórico-plásticas en el material fotográfico del Departamento de Documentación del Museo Nacional de Antropología de Madrid para desarrollar la serie Tropologías I-V, en la que pone en cuestión la visión antropocéntrica europea que contienen esas imágenes, centradas en el imaginario colonial español del siglo XIX y principios del XX.
Hay que recordar que, desde el siglo XVIII, las grandes potencias coloniales impulsaron programas de investigación para trasladar muestras de la naturaleza exótica de África o Asia a los laboratorios europeos, intentando dominarla y domesticarla mediante el conocimiento.
Estas muestras del mundo natural tuvieron que ser preservadas durante su traslado para convertirlas en lo que el sociólogo Bruno Latour llamó “móviles inmutables”, es decir, representaciones físicas que pueden ser trasladadas en el espacio sin que cambien. En el caso de los estudios antropológicos de aquella época, los móviles inmutables más conocidos fueron los negativos de rostros en escayola de las distintas etnias y, posteriormente, los retratos fotográficos. Estos móviles inmutables se reunían en colecciones, se inscribían en laboratorios y comenzaban a circular a través de colecciones y museos.
Los bustos que se representan en estas fotografías fueron enviados desde el Museo de Historia Natural de París al Museo Nacional de Antropología de Madrid a principios de 1900, gracias al Dr. Ripoche, un investigador canario residente en París que trabajó como intermediario entre los museos franceses y los españoles para la adquisición de varias colecciones de referencia de fotografías y bustos antropológicos.
Las cinco secciones en las que se estructuran sus Tropologías se corresponden a intervenciones sobre imágenes de personajes filipinos tomadas por Fernando Debas en 1887, sobre cuatro centenares de fotos de tipos humanos africanos pertenecientes a Ripoche, a infografías y fotomontajes realizados a partir de las imágenes que aficionados y profesionales tomaron durante una “exposición etnográfica” de individuos de la de la etnia Ashanti en el Palacio de Cristal del Retiro madrileño, a otros elaborados a partir de las fichas policiales de los marroquíes que formaron parte de las Fuerzas Regulares Indígenas de Melilla, pertenecientes a las Fuerzas Militares Españolas, en 1914, y a intervenciones sobre copias de bustos en escayola ejecutados a partir de rostros de personas de otras razas a comienzos del siglo pasado. Se trataba, ente caso, de copias de la copia y su mayor valor residía en satisfacer una ilusión de conocimiento sobre la imagen del otro.
Esta última sección, Tropologías V, parte del trabajo en preparación del investigador José María Lanzarote Guiral y se compone de fotografías presentadas a modo de juego de espejos donde la manipulación digital y las imágenes de síntesis (3D) transforman sus recursos realistas en servidores de su irrealidad, dejando claro que la huella del mundo físico se ha difuminado.
El propósito de las intervenciones de Pachón es revelar la fantasía contenida en el imaginario occidental en torno a un mundo considerado exótico y tribal que se desconocía.
La exposición podrá verse desde el 19 de febrero al 17 de mayo.
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