El New Museum de Nueva York exhibe un caótico panorama con el que los artistas reflexionan sobre el devenir del mundo
Del 17 de julio al 21 de septiembre de 2008 en el New Museum, Nueva York Organiza: New Museum, Nueva York Comisario: Massimiliano Gioni Obras: 90 piezas en diferentes formatos No es desde luego una exposición que podamos considerar amable, sino más bien desasosegante, ya que nos lanza de lleno a un espacio invadido por el caos, la incertidumbre, e incluso nos alerta ante la posibilidad de entrar en un mundo en el que cualquier rastro humano ha sido borrado.
NEW MUSEUM OF CONTEMPORARY ART
556 West 22nd Street (at 11th Avenue)
Nueva York
Eso es lo que el New Museum de Nueva York presenta en “After Nature”, la exposición que durante los meses de verano ocupará tres de las plantas de este renovado centro. Massimiliano Gioni, director de exposiciones del museo, ha reunido más de noventa trabajos realizados por artistas plásticos, cineastas y escritores de renombre para dar forma a una especie de novela visionada en la que se relata, ante la atónita mirada del espectador, el paisaje del futuro, que de entrada se nos muestra salvaje y en ruinas.
Entre la fantasia, la ficción, la profecía, lo mítico y lo apocalíptico, las obras seleccionadas abarcan un abanico muy extenso en cuanto a estilos y disciplinas. La muestra comienza con un documental de Werner Herzog en el que el mundo está próximo a su desparición. Junto a él, esculturas como el caballo colgando de la pared de Mauricio Cattelan o la del árbol lisiado de Zoe Leonard anuncian una suerte de desvanecimiento de la naturaleza. Las extrañas pinturas realizadas con los dedos por el también extraño Eugene Von Bruenchenhein enlazan con las visiones místicas y los rituales arcanos que inspiran la obra de Roger Ballen, Diego Perrone o Artur Zmijewski. Por otro lado, creadores como Allora y Calzadilla, Nancy Graves y William Christenberry nos hablan de cómo la desaparición de lo humano dará paso a nuevos sistemas ecológicos. Las criaturas fantásticas nacidas de artistas como Thomas Schütte, Huma Bhabha o Tino Sehgal, próximas algunas de ellas al realismo mágico, conviven con las animaciones de Nathalie Djurberg y los videos de Erik van Lieshout, en los que el holandés deja patente su honda preocupación por el mundo futuro. Y así hasta completar la larga lista de artistas presentes en la muestra.
Una visión un tanto catastrofista del futuro, pero que responde a las inquietudes de este amplio grupo de creadores y que puede servir para concienciar al público del riesgo que conlleva no cuidar el mundo que tenemos; ese que tantas veces nos lanza mensajes de auxilio que son desatendidos a causa del ritmo impuesto por la sociedad actual.