Por segundo año consecutivo, y con la finalidad de divulgar la multiplicidad de propuestas artísticas contemporáneas que cada año presentan las galerías de la capital, CentroCentro acoge el proyecto PANORAMA MADRID, que reúne un compendio de una decena de muestras que en 2021 pudieron verse en las salas de la capital y que esta vez ha seleccionado un jurado compuesto por Marta Ramos-Yzquierdo, Pilar Soler, Virginia Torrente, Sergio Rubira y Javier Martín-Jiménez.
Se trata, en todos los casos, de proyectos individuales dedicados a artistas nacidos entre los sesenta y los ochenta y muy diversos en sus presentaciones técnicas: encontraremos pintura, escultura e instalaciones junto a producción videográfica y en nuevos medios. Podrían englobarse estas propuestas en dos grandes temáticas: la reflexión sobre la propia creación y su capacidad transformadora en lo individual y lo colectivo y las problemáticas del mundo actual, sobre todo en lo relativo a la digitalización creciente.
A Cibeles regresa la argentina Mercedes Azpilicueta, con “Katalina, Antonio, Alonso”, muestra centrada en la figura de la Monja Alférez que pudo visitarse en Nogueras Blanchard y planteaba un ejercicio especulativo, entre lo historiográfico y lo imaginativo, en torno a los relatos e imaginarios que han construido su imagen. Le interesan a esta autora, que ya presentó individual en CentroCentro, las posibilidades teatrales de la escultura y la instalación y el modo en que los objetos pueden ser activados.
Martín Llavaneras mostró el pasado verano en la Galería Intersticio, y ahora de nuevo en Cibeles, “Delta”, una suerte de diario que enlaza gestos del artista y de la humanidad en relación con conceptos como la naturaleza, el patrimonio o la ecología; viene explorando el catalán, en esculturas e instalaciones, las formas de circulación de las materias primas y las sustancias que atraviesan cuerpos, objetos y palabras. Y desde Juan Silió Juan López exhibe “Surco”, el fruto de sus investigaciones más recientes sobre los signos que se generan en la construcción y el desarrollo de las ciudades, entendiendo las urbes como entorno arqueológico. Este artista cántabro asocia en su producción elementos arquitectónicos a estructuras de poder y propone lazos alternativos entre los núcleos urbanos, las subjetividades y dicha autoridad.
CentroCentro recupera también la propuesta de Miquel Mont para Formato Cómodo “Deseos borrados, recoloreados”; constaba de una serie de pinturas y collages elaborados a a partir de embalajes de productos comprados en el supermercado y consumidos en el tiempo de confinamiento, que el artista pasó en París, lejos de su estudio y con escasos materiales de trabajo. Valiéndose de sus manos y de esos enseres cotidianos, desarrolló composiciones abstractas que a veces evocan ready-mades y que incorporan los diseños, tipografías y logotipos propios de nuestro imaginario plástico. En cualquier caso, la producción de Mont nunca ha podido entenderse como exclusivamente pictórica, pues la aproxima a las tres dimensiones sirviéndose de madera y metacrilato.
Sobre nuestro impacto individual en el mundo versó la propuesta de Julian Rosefeldt en Helga de Alvear “Penumbra”, formada por dos vídeos y una serie fotográfica. Un espacio ficticio fue su punto de partida para imaginar un futuro en el que la especie humana ha abandonado definitivamente la Tierra para asentarse en otro planeta, desértico e hiperurbanizado. De Albarrán Bourdais, por su parte, llega “Ex Positio”, de Fernando Sánchez Castillo, que no suele mirar hacia delante sino al pasado. Recogía aquella muestra sus últimas investigaciones a partir de un dibujo del general Barragán que aparece en la película El grito; en papeles y lienzos de gran formato ha recreado las pintadas que aparecieron en los muros de las ciudades españolas tras la muerte de Franco y nos los enseña junto a una serie de máscaras a medio camino entre la expresión artística y la demanda social.
De Heinrich Ehrhardt se ha recuperado la exposición “Circular Spaces” del lisboeta Gonçalo Sena: se trataba de un jardín en forma de fragmentos duros y suaves y habitado por significados codificados; podíamos entenderlo como instalación compuesta por esculturas, dibujos y objetos que contienen meditaciones personales ligadas al paisaje, los escombros o las mutaciones físicas en la vida de los objetos y en el mundo natural. Importan a este autor portugués las distancias y lazos entre lo construido e industrial y los procesos entrópicos de la naturaleza y la vida orgánica. Y de la Galería Freijó llegan Los Torreznos, con “Las Palabras y las Cosas”, exhibición ligada a la pandemia y a la pérdida de contacto físico que ha conllevado. Proponía un juego de distancias en el que la voz grabada y reproducida sintonizaba con la realidad diferida y el arte devenía espacio para revalorizar la experiencia cotidiana.
Por último, han recalado en CentroCentro “Rayo Verde”, de Belén Uriel (desde The Ryder Projects) y “Con los ojos abiertos en la oscuridad”, de Oriol Vilanova (desde Elba Benítez). Para la primera, Uriel se inspiró en el fenómeno entre óptico y meteorológico así llamado y descrito por Julio Verne a la hora de vertebrar un cuerpo de trabajo relativo a la idealización interesada de la naturaleza; en la segunda, encontrábamos instalaciones y esculturas compuestas a partir de las habituales postales coleccionadas por ese artista; ese acto, el de atesorar, resulta fundamental en su práctica, que se acerca así a lo performativo. Estas tarjetas devienen, además y de su mano, un medio estético versátil y fuente de lecturas múltiples.
“PANORAMA MADRID 02”
CENTROCENTRO. PALACIO DE CIBELES
Plaza de Cibeles, 1
Madrid
Del 25 de febrero al 29 de mayo de 2022
