Se crea en 1932 para dar cumplimiento a la voluntad de la mujer del pintor valenciano Joaquín Sorolla (1863-1923), la cual había expresado a su muerte el deseo de que no fuera dispersado el legado de su marido y había pedido que fuera expuesto al público de forma permanente. El Estado acepta la donación y constituye el museo como una sociedad benéfico-docente, regida por un Patronato. La última vivienda y estudio del pintor, rodeada de magníficos jardines, sirve de marco para la exhibición de cuadros fundamentales en la carrera del valenciano como La bata rosa o Nadadores en Jávea. El edificio ha sufrido sucesivas remodelaciones en los últimos años. ´
Esta Casa- Museo alberga la mejor colección de obras del pintor valenciano. Destaca la conservación del estudio del pintor y la ambientación de una casa burguesa de principios de siglo, en la que pueden contemplarse , además, los objetos reunidos por el artista ( escultura, cerámica, joyería popular, metalistería y mobiliario).

Tras cerrar durante un año para adpatar el edificio a las necesidades museológicas y arquitectónicas pertinentes, el centro volvió a abrir sus puertas al público en 2002.