El Patronato del Museo del Prado ha anunciado esta mañana la propuesta ganadora del concurso internacional para la rehabilitación arquitectónica y la adecuación museística del Salón de Reinos: se trata del proyecto presentado por Foster + Partners L.T.D. y Rubio Arquitectura S.L.P, temporalmente unidos.
TRAZA OCULTA, ESPACIOS ABIERTOS
La propuesta, escogida por unanimidad del jurado, se presentó bajo el lema “Traza oculta” y ya podemos avanzar algunos detalles de cómo podría quedar el nuevo edificio: sabemos que se incorporará a la fachada sur un gran atrio de acceso que dará a este espacio un carácter semiabierto al exterior, sin descuidar la necesaria protección de la fachada original del Salón de Reinos, cuyos huecos y balconadas serán recuperados. También se ha hecho público que sobre esa fachada emergerá la prolongación del espacio expositivo de la tercera planta, que dispondrá de mayor anchura y altura libre que el actual y que formará la cubierta del atrio, que tendrá, además, carácter de terraza orientada al llamado campus del Prado.
Este diseño hace innecesario excavar nuevos sótanos en el edificio, a la vez que realza sus espacios históricos, sobre todo el Salón de Reinos. Se evitan así posibles poblemas subterráneos como los que surgieron con la ampliación de Moneo.
El jurado del galardón ha valorado en la propuesta de Foster y Rubio “la gran calidad de la propuesta arquitectónica, que respeta y valora lo existente adecuándolo a las necesidades de nuestro tiempo; la inteligente satisfacción de los requerimientos museológicos; la acertada integración del edificio en su entorno, así como en el conjunto del campus del Museo del Prado; y el eficaz estudio de costes de la obra”.
CHIPPERFIELD, CRUZ Y ORTIZ O SOUTO DE MOURA, ENTRE LOS FINALISTAS
El concurso para seleccionar al equipo arquitectónico que rehabilitaría el Salón de Reinos (parte, hay que recordar, del que fuera Palacio del Buen Retiro y antigua sede del Museo del Ejército) se abrió en marzo y a él concurrieron 47 estudios. Entre ellos fueron seleccionados el pasado junio ocho finalistas: UTE Foster + Partners – Rubio Arquitectura, Cruz y Ortiz Arquitectos, Nieto Sobejano Arquitectos, UTE B720 Arquitectura-David Chipperfield Architects, Office for Metropolitan Architecture (O.M.A.) Stedebouw B.V., UTE Souto Moura Arquitectos, Juan Miguel Hernández León, Carlos de Riaño Lozano, UTE Garces de Seta Bonet Arquitectes, Pedro Feducci Canosa y UTE Gluckman Tang Architects – Estudio Álvarez Sala – Arquitectura Enguita y Lasso de la Vega.
Los proyectos que estas ocho firmas presentaron al jurado el pasado octubre podrán contemplarse a partir del 1 de diciembre en el Claustro de los Jerónimos. Algún mes más tarde, a principios de 2017, se iniciará la redacción del proyecto ganador, que se prolongará durante dieciséis meses, y a comienzos de 2018 está previsto que arranquen las obras de remodelación.
Hay que recordar que el del Salón de Reinos no será el primer encargo museístico que desarrolle Norman Foster, que ha trabajado para el Carré d’Art de Nimes, el Gran Patio y las Galerías Sainsbury del British Museum, el Patio Robert y Alene Kogod de la Smithsonian Institution de Washington, el Museo de Bellas Artes de Boston, la Lenbachhaus de Múnich o el War Imperial Museum británico.
Rubio Arquitectura, por su parte, fue fundado en 2014 por el arquitecto barcelonés Carlos Rubio Carvajal y tiene sede en Madrid. Actualmente está desarrollando proyectos en España, Rusia o Arabia Saudí y ha obtenido, entre otros galardones, el Premio COAM de Arquitectura 1989.
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