Habitualmente Isidro López Aparicio trabaja con objetos cotidianos, rescatándolos para configurar con ellos arqueologías de lo diario que sirvan para reflexionar y activar nuestra memoria cercana. Los recolecta, cataloga, descontextualiza y reinterpreta para invitar a los espectadores a observar esos objetos desde un enfoque crítico y a repensar las relaciones que establecemos con ellos y en qué medida inciden en ellas las leyes del mercado y nuestra tendencia consumista.
Entiende el artista los objetos como piezas susceptibles de estimular acciones que conecten a quien los contempla con su pasado y que propongan un cuestionamiento consciente del presente y de sus conflictos no resueltos, sobre todo en lo relativo a nuestros modos de adquirir, usar y tirar.
A otro conflicto no resuelto, no vinculado con el consumo sino con la tragedia humana de la que el Mediterráneo es escenario, se dedica el nuevo proyecto de López-Aparicio. Participa hasta el próximo 23 de abril en el Pompidou malagueño en la segunda edición de “Hors Pistes”, titulada Traversées. Se trata de una exposición, concebida de manera conjunta por los equipos Pompidou de París y Málaga, que explora el impacto de las rutas marítimas en el ámbito del arte y de la imagen en movimiento.
El artista viene remando con frecuencia, desde hace años, desde la costa europea hacia la africana, en dirección contraria a la seguida por cientos de miles de personas que huyen de la pobreza o los conflictos. En ese ocasión ese acto se dota de simbolismo a la hora de convertirse en una acción empática, en un intento de sentir el mar como se hace desde la otra orilla, como espacio vigilado e inmenso, común y no fronterizo, un lugar de tránsito hacia la esperanza lleno de peligros.
En Málaga, López-Aparicio exhibe una instalación compuesta de dos partes. La primera es una habitación con proyección interior sobre tres paredes, que se refleja en el suelo sobre un vinilo transparente. Al entrar en su espacio interior, el espectador se ve inundado de mar, presente en todas sus paredes y en el reflejo del suelo. Observa un remar constante en el que el navegante carece de puntos de referencia y desconoce a ciencia cierta su destino, sumergiéndose en las sensaciones que viven los migrantes.
La segunda se despliega en el exterior de la habitación, donde varias pantallas muestran grabaciones de la costa africana y la europea. Contemplamos allí agua del Mediterráneo, smartphones y iPads conectados a tiempo real con cámaras de vigilancia y de satélite de las costas, grabaciones de distintos tránsitos en el mar, incluidos los de los ferries turísticos, y más de mil páginas de documentos con datos de las migraciones en el Mediterráneo, desde mapas históricos a datos e informes actuales.
Se trata de un paso más en el compromiso social de López Aparicio, cuya trayectoria ha tenido un destacado carácter político y activista. Ha trabajado en Sudán, Siria y Jordania, en espacios carcelarios o con minorías sociales.
“Hors Pistes: Travesías marítimas”
Pasaje Doctor Carrillo Casaux, s/n
Málaga
Del 23 de marzo al 23 de abril de 2017
