Ibon Aranberri, obstáculos para la renovación

Elba Benítez exhibe sus últimos monumentos secundarios

Madrid,
Ibon Aranberri. Obstáculos para la renovación
Ibon Aranberri. Obstáculos para la renovación
Ibon Aranberri. Obstáculos para la renovación
Ibon Aranberri. Obstáculos para la renovación

La producción de Ibon Aranberri la componen fundamentalmente “monumentos secundarios” transformados por su emplazamiento y por las reflexiones del artista vasco. Su magnitud es más pequeña que la de enclaves arqueológicos como Stonehenge, pero tienen algo en común con aquellos: según algunas investigaciones, estas estructuras no ocupan el lugar en el que inicialmente se dispusieron, sino que a lo largo del tiempo han sido trasladadas, aunque no sepamos cómo, cuándo ni por qué. Su ubicación en un emplazamiento no original hace que las consideremos “monumentos secundarios”, como podemos calificar a los trabajos de Aranberri, una vertiente actual de esas estructuras.

Varios de ellos pueden verse, desde el pasado 26 de febrero, en la Galería madrileña Elba Benítez, dentro de la muestra “Obstáculos para la renovación”, pero la apariencia totémica o rudimentaria de algunas de estas piezas no debe llevarnos a engaño: los procesos de trabajo de Aranberri son altamente meticulosos y el contenido de las obras da lugar a investigaciones profundas, adquiriendo estas un carácter mucho más sutil que el que podemos asociar a piedras y estatuas en general. Aunque en lo formal los proyectos de Aranberri se dediquen al análisis de monumentos atemporales, los replantean hasta concederles nuevos significados.

El resultado es una paráfrasis, recurso comúnmente estudiado en el ámbito literario que, en el caso de las investigaciones de Aranberri, implica que existe una estructura (un código, matriz o “forma”, material o inmaterial) que trasciende el proceso de re-enunciación o re-localización forzoso de los que devienen monumentos secundarios.

Al preguntarse cuáles son las estructuras y los lugares “esenciales”, Aranberri opta por utilizar también la fotografía atendiendo a su valor como forma de re-localización forzosa

Ibon Aranberri. Obstáculos para la renovación
Ibon Aranberri. Obstáculos para la renovación

De sus estudios podemos deducir que es esta estructura mayor la que dota al conjunto de su sentido último, y que, por esa razón, este puede descomponerse y recomponerse sin peligro de quedar desvirtuada en cualquier otro lugar. Y esta conclusión nos hace plantearnos qué sucede con las sombras y las resonancias, el patrón de tensiones y sus resoluciones que quedan al margen de ese proceso.

Al preguntarse cuáles son las estructuras y los lugares “esenciales”,  Aranberri opta por utilizar también la fotografía atendiendo a su valor como  forma de re-localización forzosa; de re-enunciación o de re-significación, que tiene mucho en común con las piedras numeradas y recolocadas que las mismas imágenes nos enseñan.

Con el mismo sentido que estas fotografías, el conjunto de la exposición de Elba Benítez y su montaje están concebidos como réplica secundaria inscrita en una serie de ecos, sombras o resonancias propias.

Formado en sus inicios como escultor, Ibon Aranberri ha trabajado después en una amplia variedad de formatos, como la citada fotografía, el cine y las prácticas colaborativas. En conjunto, sus trabajos examinan la  intervención humana dentro el entorno natural y la superposición en el paisaje de historia, cultura, estética y política.

Trabaja casi como un científico, con precisión y análisis, explorando a fondo códigos de significación y representación y pretsando también mucha atención a la estética tanto en sus objetos individuales como en sus presentaciones expositivas, siempre de carácter conceptual.

Ibon Aranberri. Obstáculos para la renovación
Ibon Aranberri. Obstáculos para la renovación

 

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