Giorgio Griffa se estrena en Portugal

Llega al Museo Serralves la mayor retrospectiva del pintor

Giorgio Griffa. 1968-2014
Giorgio Griffa. 1968-2014

Giorgio Griffa fue uno de los artistas que, a partir de los años sesenta, comenzó a indagar a través de su producción en el valor de la pintura como tal y en el sentido que el acto de llevarla a cabo tenía para él, en línea con movimientos internacionales como el español Pintura-pintura, el francés Support-Surfaces o los creadores  norteamericanos que empezaban a cultivar una abstracción radical.

Este turinés del 36, próximo al Arte Povera en una etapa temprana del mismo, ha convertido el estudio del lenguaje pictórico en el eje de su carrera, incluso cuando la escultura cosechaba todas las atenciones. Nunca buscó representar, simplemente pintar, y el conjunto de su obra ha girado en torno a tres conceptos fundamentales: el ritmo, la  secuencia y el signo.

Suele trabajar directamente con las telas en el suelo, sin bastidor para controlar goteos, y empleando acuarelas, témperas o acrílicos sobre superficies diversas: cáñamo, lino, yute o algodón. En ellas encontramos líneas paralelas de diferentes grosores, a veces ondulantes, o pequeños puntos de color.

Giorgio Griffa. 1968-2014
Giorgio Griffa. 1968-2014

Asociamos a menudo a Griffa al minimalismo, pero en sus repeticiones trata de introducir un elemento de variación, un gesto sutil que remita al tiempo y a la especificidad de cada obra como pieza única. Más adelante buscaría alejarse, en cierta medida, del resultado final sus trabajos, entendiéndose a sí mismo más como espectador de la pintura que se hace por sí misma que como autor, y subrayando la organicidad de este género. En aquella  etapa, a finales de los sesenta, dejaba grandes porciones de las telas sin pintar, permitiéndonos ver su trama sin manipular y dando también cierto espacio al misterio presente allí donde no hay nada más que vacío.

Si en los inicios del povera Griffa se adentró en la humildad del movimiento, en los noventa volvió a incorporar referencias a aquel en forma de números y de alusiones a la proporción aurea y la fórmula Fibonacci: era su intento por tratar de pintar y de entender lo infinito. Antes, en los ochenta, trabajó en torno al potencial expresivo del color, la línea y el gesto.

Giorgio Griffa. 1968-2014
Giorgio Griffa. 1968-2014

 

Giorgio Griffa. 1968-2014
Giorgio Griffa. 1968-2014

Tras pasar por el Centro de Arte Contemporáneo de Ginebra, la Konsthall de Bergen y la Fondazione Giuliani de Roma, el próximo 14 de mayo recala en el Museu Serralves de Oporto “Quasi tutto”, que será su primera antología en Portugal. Consta de cuarenta pinturas y más de cincuenta dibujos fechados entre 1969 y 2015 y busca subrayar el compromiso de Griffa con la propia pintura y con una concepción de la misma que traspasa lo artístico para adentrarse en lo metafísico.

Además de pinturas de su serie Alter Ego, en la que entabló una suerte de diálogo conceptual con grandes artistas como Tintoretto, Matisse o Agnes Martin, en Oporto podremos ver la serie Arabesco, sus trabajos en líneas horizontales o dibujos que, por realizarse en paralelo a sus pinturas, aportan una valiosa información sobre los intereses que desplegó en las mismas y sobre el continuo trabajo de Griffa con ideas de índole filosófica.

Giorgio Griffa. 1968-2014
Giorgio Griffa. 1968-2014

 

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