Cinco exposiciones otoñales para amantes de los libros

21/09/2015

Habrá más en los próximos meses, pero desde Fuera de menú os proponemos visitar cinco muestras, ya inauguradas o a punto de hacerlo, dedicadas a libros de ayer y de hoy y al mimo con el que se cuidaron sus ediciones. Nos consta que el apartado dedicado a publicaciones y documentación es uno de los menos frecuentados en exposiciones dedicadas a artes plásticas, así que visitar muestras como éstas puede ser un primer paso para mirar las páginas (como objeto expositivo) de otra manera.

La fortuna de los libros. Museo Lázaro Galdiano
La fortuna de los libros. Museo Lázaro Galdiano

 

LA FORTUNA DE LOS LIBROS. Coincidiendo con la celebración del Congreso de la Asociación Internacional de Bibliófilos, el Museo Lázaro Galdiano abre el 23 de septiembre “La fortuna de los libros”, una exposición compuesta por veintiocho joyas bibliográficas, la mitad manuscritas y la mitad impresas, que forman parte de las más de 20.000 que reunió José Lázaro, gran amante de los libros. Entre ellos destacan el Ceremonial de consagración y coronación de los reyes y reinas de Aragón, de fines del s XIV; un manuscrito del Libro de las propiedades de las cosa, de comienzos del s XV; el Libro de horas de William Hastings o los Caprichos de Francisco de Goya.

Libros vivos. Museo Casa Lis
Libros vivos. Museo Casa Lis

LIBROS VIVOS. Todos lo están cuando alguien los lee, pero la muestra que hasta el 15 de enero podemos disfrutar en el Museo Casa Lis de Salamanca se centra en los libros móviles y desplegables, algunos centenarios, que se han editado en España hasta ahora. Pertenecen a la colección de Ana María Ortega Palacios y Álvaro Gutiérrez Baños, dos palentinos enamorados de estas creaciones.

A través de esta muestra podremos adentrarnos en las técnicas de trabajo en papel que emplearon sus diseñadores, algunos vinculados al Art Nouveau y al Art Decó, movimientos en los que se centra este museo.

No os perdáis las ilustraciones para obras infantiles de Ernest Nister, los dibujos animados de Lothar Meggendorfer o las imágenes tridimensionales y móviles de Raphael Tuck, los tres figuras representativas de esa etapa de esplendor que vivieron los desplegables a fines del s XIX. Nuestros abuelos quizá podrán recordar también las creaciones del checo Vojtech Kubasta, que alcanzaron difusión en librerías de medio mundo en los cincuenta.

LA OFICINA DE SAN JERÓNIMO. Es sabido que las relaciones entre pintura y literatura siempre han sido intensas, por eso Eduardo Arroyo es comisario, junto a Fabienne Di Rocco, de la muestra “La oficina de San Jerónimo”, que desde el 17 de septiembre podemos contemplar en la Casa del Lector y que pretende ser “homenaje al libro, a la narración, a la lectura, a la escritura y a las metamorfosis de lo escrito”. Su última sección, titulada Literatura imposible, incluye un centenar de volúmenes de complicada lectura, entre ellos obras procedentes del Oulipo (Obrador de literatura potencial), obras letristas o desprovistas de ilustración.

El propio Arroyo, junto a Gilles Aillaud y Antonio Recalcati, llevó a cabo en 1965 trece lienzos inspirados en la novela corta de Balzac “Une passion dans le désert” que también forman parte de esta exhibición.

ALGO DE KIPLING. Ni le faltaron lectores en su tiempo, ni escasean hoy los que buscan El libro de la selva o Capitanes intrépidos en librerías y bibliotecas. Las obras de Rudyard Kipling, del que este año se conmemora el 150º aniversario de su nacimiento, se siguen editando en varios idiomas y, aunque lo conocemos fundamentalmente por sus cuentos, el autor indio también escribió poesía, novela y ensayo. La Biblioteca Nacional repasa esas facetas suyas menos abordadas en la pequeña pero deliciosa exposición “Algo de sí mismo”, abierta hasta el 7 de noviembre en la antesala del Salón de Lectura.

QUIJOTES DEL MUNDO. Algo antes, el 4 de octubre, finalizará en el Instituto Cervantes de Madrid la exhibición “Quijotes del mundo”, que tiene como doble objetivo mostrar al público la riqueza bibliográfica de la red de bibliotecas del Instituto Cervantes y homenajear a los cientos de traductores que han contribuido a la difusión del Quijote en todo el mundo. Además de Quijotes de diversas lenguas y épocas, para niños y en Braille, podemos ver carteles de cine, el vídeo La maleta de Cervantes y la protección del filme de Javier Rioyo El Quijote cabalga por el Cine.

La oficina de San Jerónimo. Casa del Lector
La oficina de San Jerónimo. Casa del Lector

 

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