Francisco Leiro: cuerpos y sus circunstancias

La Galería Marlborough expone en Madrid sus esculturas recientes

Madrid,
Francisco Leiro. Bañista, 2017
Francisco Leiro. Bañista, 2017

Tras exponer, en años pasados en Nueva York y A Coruña, y también en la pasada edición de ARCOmadrid, esculturas de índole política y humanista  vinculadas a su tratamiento de la dimensión individual y colectiva del cuerpo en relación con conflictos como la guerra de Siria, Francisco Leiro regresa a la sala Marlborough madrileña con “Cuerpo inventado”, una exhibición en la que presenta piezas recientes en las que se ha alejado muy intencionadamente de un tratamiento naturalista de la anatomía para presentar cuerpos (sujetos) fusionados a objetos: prendas, muebles, instrumentos de trabajo…

No es un rasgo del todo nuevo en su trabajo (en su serie Dolor de ropa, de 2003, ya representó individuos vestidos en los que hacía hincapié en la contemporánea concepción de la identidad como lo que se posee), pero es en estas obras recientes en las que con más profundidad se ha adentrado en las hondas relaciones de continuidad entre el ser humano y su ajuar diario en el mundo de hoy. No nos sitúa Leiro ante monos vestidos, sino ante una indumentaria y un mobiliario que entabla una relación peculiar con los sujetos en la que no sabemos quién domina a quién, o ante individuos que parecen muebles o que no pueden tener sentido sin uno al lado.

Si esos objetos esconden, transforman y condicionan al individuo, que no parece tener sentido sin ellos, la esencia de este se convierte en ficción, por eso los personajes que Leiro elige mostrarnos son absolutamente anónimos e intercambiables: no hay expresividad en sus rostros, las texturas no contribuyen a la diferenciación y lo que cobra importancia, ante la mirada del espectador, es una policromía que aporta carácter al mobiliario o a la ropa, no a los sujetos.

Francisco Leiro. Ponte, 2016
Francisco Leiro. Ponte, 2016

Este conjunto de esculturas recientes en madera se completa en esta exposición, abierta durante un mes (hasta el 5 de mayo), con una serie de dibujos: en la mayoría de los casos se trata de bocetos preparatorios de las esculturas, pero no siempre. Quizá los más interesantes sean los trabajos sobre papel realizados a partir de las plantillas y de las siluetas con las que desarrolló estas esculturas.

Leiro, que hasta el pasado enero también expuso una selección de sus trabajos últimos en el CAC de Málaga, está hablando en último término, ahora en Madrid como entonces, en estas piezas y en las que remiten a la guerra, de las distintas caras de nuestra actual vulnerabilidad, de una fragilidad que puede ser creciente en la medida en que lo es nuestra dependencia.

Pese a la rotundidad de la materia, la voluminosidad de las formas o la tosquedad de una madera sin pulimento que afirma la consistencia de sus esculturas, brutales y objetivas como defendía Baudelaire que debían serlo, el eje de las obras es nuestra debilidad, vista con ironía frente a su anterior mirada dura y sensible a las tragedias de la violencia.

Francisco Leiro. Tomás, 2017
Francisco Leiro. Tomás, 2017

 

Francisco Leiro. Dibujo 15 (serie NY), 2016
Francisco Leiro. Dibujo 15 (serie NY), 2016

 

“Francisco Leiro: Cuerpo inventado”

GALERÍA MARLBOROUGH

c/ Orfila, 5

Madrid

Del 5 de abril al 5 de mayo de 2018

 

 

Comentarios