Comienza sus estudios de escultura y cerámica en Barcelona, viajando a México en 1949 donde se inicia en la pintura y en la tipografía. Durante más de cuarenta años realiza una extensa obra como pintor, escultor y diseñador gráfico, recibiendo en 1993 la Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes. Su obra se distingue por el ascetismo y por su lenta y precisa manera de construir el espacio plástico, desde unos radicales principios de organización y estructuración de la forma. La pintura de Vicente Rojo se encuentra en la tradición de los pintores que abordan la realidad desde la perspectiva de su particular paisaje mental, como Mondrian o Morandi , conjugando todo el repertorio de vibraciones y gamas tonales en una paciente constructividad, densa y meditativa. Destacan sus exposiciones retrospectivas en el Museo Universitario de Ciencias y Arte, México DF (1973), Biblioteca Nacional, Madrid (1985), Museo de Arte Moderno, México DF (1981 y 1996), y Museo Nacional Reina Sofía, Madrid (1997).